Texto y foto principal: Francisco Rincón.

El lanzamiento del Índice ODS 2022, que monitorea el avance en la implementación de la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible en la región, reveló que Venezuela está entre los cuatro peores países ranqueados.

Este informe elaborado por el Centro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible para América Latina y el Caribe (CODS) de la Universidad de los Andes (Colombia), detalla entre los principales hallazgos que la región tiene un limitado cumplimiento de la Agenda 2030. Si bien existen diferencias importantes entre países, en general se resalta que pocos muestran un desempeño adecuado.

Los países mejor ranqueados en la región son Brasil, Uruguay y Costa Rica, con un puntaje agregado superior a 60; sin embargo, este cumplimiento no es generalizado en todos los ODS. En el otro extremo se encuentran países como Venezuela, Panamá, Honduras y Guatemala, siendo los de menor desempeño entre los 18 países analizados en el reporte con puntajes inferiores al 52%, seis puntos por debajo del promedio de la región (58,98%).

Índice ODS 2022 elaborado por el Centro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible para América Latina y el Caribe (CODS).

Al examinar las tendencias a nivel global, se observa que la mayoría de los países de América Latina y el Caribe están experimentando un progreso moderado o se mantienen estancados en el logro de gran parte de los ODS. Esta situación muestra que la región no está avanzando al ritmo esperado para cumplir con las metas de la Agenda 2030.

Venezuela en la cola

Bolivia, Panamá y Venezuela son los países que han mostrado un avance en dirección opuesta a lo previsto en seis Objetivos, para los dos primeros, y siete ODS para el último. Venezuela presenta las tasas de pobreza más altas de los 18 países de la región incluidos en el análisis, ha visto empeorada su infraestructura para el transporte comercial y la generación de innovación (ODS 9), así como su capacidad para propiciar estadísticas nacionales y su inversión pública en salud y educación.

De acuerdo al tablero de desempeño por Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), Venezuela presenta un rezago crítico en el ODS 16 (Paz, Justicia e Instituciones Sólidas); rezago significativo en los ODS 1 (Fin de la pobreza), ODS 2 (Hambre cero), ODS 3 (Salud y Bienestar), ODS 4 (Educación de calidad), ODS 9 (Industria, Innovación e Infraestructura), ODS 11 (Ciudades y Comunidades Sostenibles), ODS 12 (Producción y Consumo Responsables) y en el ODS 17 (Alianzas para lograr los Objetivos).

En otros seis ODS (Igualdad de Género; Agua Limpia y Saneamiento; Energía asequible y no contaminante; Trabajo decente y Crecimiento económico), el rezago del país es moderado. El único Objetivo alcanzado, según el informe, es el ODS 13 (Acción por el clima) y no hay datos disponibles sobre el ODS 10 (Reducción de las desigualdades).

Índice ODS 2022 elaborado por el Centro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible para América Latina y el Caribe (CODS).

A la baja

En el caso venezolano, con respecto a las tendencias, en 16 de los 17 ODS la velocidad de progreso hacia el logro de cada uno es decreciente o está estancado. Esto significa que los Objetivos avanzan en una dirección contraria a la esperada y refleja un retroceso en el cumplimiento de las metas trazadas, o bien, que se mantienen estables o avanzan a una tasa menor del 50% de la tendencia esperada. Esto último, videncia un estancamiento en el cumplimiento de las metas trazadas en cada ODS.

Índice ODS 2022 elaborado por el Centro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible para América Latina y el Caribe (CODS).

Con respecto a la salud, uno de los indicadores que resalta el informe es el de la cobertura de vacunación de niños y niñas menores de 5 años. Este indicador ha presentado una caída en la mayoría de los países, iniciando antes de la pandemia por COVID-19, y que se incrementó por esta situación en el 2020. Países como Argentina, Bolivia y Venezuela han visto una disminución importante en la cobertura de vacunación desde el inicio de la Agenda. El logro de este indicador es fundamental para garantizar la contención de enfermedades contagiosas en la sociedad en el corto y en el largo plazo.

Sobre paz, instituciones y corrupción, en América Latina y el Caribe el acceso a la justicia es un aspecto de vital importancia dado que en países como Perú, Venezuela, México, Haití y Guatemala el puntaje de acceso que tiene la población a la justicia es muy bajo y en el 2022, la población de Nicaragua, Haití y Venezuela tenía la mayor percepción de que sus Gobiernos eran los más corruptos.

Índice ODS 2022 elaborado por el Centro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible para América Latina y el Caribe (CODS).

El Índice menciona que en América Latina y el Caribe continúa existiendo un porcentaje significativo de niños y niñas que a la edad de 5 años no han sido registrados. Aunque en promedio la región presenta más del 90 % de los niños y niñas registrados, países como Paraguay, Haití, Venezuela y Ecuador registran una proporción menor al 85 % en algunos casos.

Teoría sin práctica

La ratificación de la disposición del gobierno de Nicolás Maduro a representantes de la Organización de Naciones Unidas (ONU) en octubre pasado para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) dista de los avances y logros del país hasta la fecha.

Desde 2016, Venezuela no ha avanzado en 95 de las 160 metas relacionadas con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) que los países, en coordinación con la Organización de Naciones Unidas (ONU), se comprometieron a alcanzar para 2030, según un informe presentado por la red de ONG Sinergia.

Canciller de la República, Yvan Gil.

En 7 años se habrán cumplido los 15 años que los líderes mundiales se trazaron para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). La realidad es que el cumplimiento de estos objetivos en la región está estancado, en comparación con años anteriores.

En la región hay desafíos importantes en áreas como la protección de la biodiversidad; se evidencian tendencias decrecientes en el cumplimiento del trabajo decente y crecimiento económico, acción por el clima y producción y consumo responsable, entre otros.

Por su parte, en la esfera ambiental, alarma la disminución de la disponibilidad de agua, la heterogeneidad en la declaración de áreas protegidas y la vulnerabilidad al cambio climático, a pesar de una baja contribución de CO₂ por parte de la región. Otro reto es la importancia de mejorar la calidad del aire en las ciudades.

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